Viviendo Nuestro Propio Cuento De Hadas

Toda niña en algún momento de su infancia soñó con vivir su propio cuento de hadas con algún día encontrar su príncipe azul. Con aquel amor que aunque a veces difícil y turbulento al final siempre triunfa. Nos aferramos con la ilusión de convertir aquel sapito del cuento en príncipe. Con aquel beso mágico que lo cambia todo. Pero en este mundo hay que soñar despierto porque aunque llegue la hada madrina la realidad es que pueda que el traje no te sirva. Que la calabaza jamás se convierta en una hermosa carilla y que al llegar al baile el príncipe nunca se fije en ti; Elija a otra, ni te lleva de la mano ni se va contigo..... podría también darse la casualidad de que esa zapatilla perdida llegue a ti para podértela medir pero que aquel zapato del cuento frágil y hermoso de cristal se haga mil pedazos antes de tocarte el pie. Mas bien andamos buscando lo que no tenemos en ves de luchar por aquello que ya conocemos y es nuestro. Pasamos por la vida mordiendo manzanas venenosas que nos dejan en limbo y a veces en un eterno y peligroso sueño. En vez de un príncipe nos toca la bestia, en vez de un paraíso lo que nos espera es la incertidumbre del mundo de Alicia que por mas esfuerzo que hagamos por mantenernos a flote mas resbalemos hacia el fondo. Pero en fin para vivir contento hay que elegir de adentro hacia afuera sobre todo aprender a ser realistas. Mejor dediquémonos a poner los pies bien firmes sobre la tierra y se conforme. Una enseñanza dura pero necesaria aprendamos a valorar y luchar por lo que es nuestro sin fantasías para así no perdernos en los cuentos estemos dispuestos siempre a reconocer y ser consiente de nuestros propios defectos en ves de asignar villanos maleficiosos porque no mejor ser el héroe del cuento. Hay que aprender a ver a cada ser humano por lo que es y no en lo que quisiéramos que fuera. Quizás no vivirás como en los cuentos de hada pero tendrás momentos felices en un mundo real y duradero y por sobre todas las cosas disfrutaras de aquellos momentos simples que nos regala la vida.